Varios de los emblemas más visibles de la actualidad tuvieron orígenes bastante humildes. En 1975, la marca deportiva Nike pagó 35 dólares a Carolyn Davidson para desarrollar el famoso Swoosh. No hay duda de que hoy, la famosa flechita de la compañía de Oregón es una de las marcas más reconocibles del planeta permaneciendo intacta durante casi cuarenta años.
Por otro lado, en los últimos tiempos, el precio de los diseños de logotipos se ha disparado. En 2008, Pepsi pagó a Arnell Group la friolera de 1 millón de dólares por un rediseño.
Pero, ¿qué hay de los logos de las empresas tecnológicas? ¿Cómo han evolucionado en los últimos años? Algunos de ellos tuvieron un origen bastante alejado a lo que las tendencias del ‘branding’ los han hecho ser. Desde tipografías horribles a imágenes de difícil lectura según los cánones actuales. Allá van diez de los más famosos:
Apple
El primer logo de Apple vio la luz en 1976 con una apariencia ‘retro’. Tanto que parecía sacado de un antiguo ex libris de un ejemplar incunable. Efectivamente, ahí está Isaac Newton esperando a que le caiga la manzana. En su primer momento, el emblema fue registrado con un también emperifollado epígrafe: “Newton: una mente permanentemente viajando por los extraños mares del pensamiento”. Tela. El diseño corrió a cuenta de Ronald Wayne, uno de los fundadores de la empresa de Cupertino que cambió su 10% en acciones por 800 dólares en retribución por el diseño. Abandonó la empresa dos semanas después.
Microsoft
Un año antes que su competidor, Microsoft lanzó su primera imagen de marca. La década de los setenta hizo estragos en un diseño que parece invitar al desparrame discotequero de la época. Por otro lado, enfatiza el nombre de la compañía – unión de microcomputación y ‘software’. Las ventanitas vendrían con el famoso 3.1 de su sistema operativo.
IBM
Mucho antes de que Microsoft o Apple se lanzaran a la aventura, IBM ya era una reconocida empresa de informática. Nacida en 1888 como International Time Recording Company, cambió su nombre a International Business Machines en 1924 y la nueva era vino acompañada de aquel nuevo logo con pinta de bola del mundo.
Canon
En 1934, dos inventores japoneses crearon una cámara fotográfica bajo la denominación de Precision Optical Instruments Laboratory. La máquina se llamó Kwanon en honor a la deidad budista de la misericordia. El logo incluye a Kwanon rodeado de llamas y despliega numerosos brazos. Años después, los inventores tuvieron a bien simplificar tanto el nombre como el logo de Canon.
Motorola
La historia de Motorola también tiene miga. En 1930, la empresa radicada en Chicago, Galvin Manufactoring desarrolló una radio para coche que se hizo muy popular: la Motorola. El nombre procede de la union de motor y ‘ola’, un sufijo empleado para referirse a los discos que se reproducían en los gramófonos o victrolas de la época. La radio Motorola se hizo tan famosa que Paul Galvin, presidente de la compañía, decidió asumir su nombre para el de la empresa que, como muchas otras, ha variado con el tiempo el tipo de productos que fabricaba.
Nokia
Como IBM, Nokia hunde sus raíces en el siglo XIX. Knut Fredrik Idestam levantó un molino de pulpa de madera en Finladia y tomó prestado el nombre de un pueblo cercano. Nokia parece referirse en finés antiguo a algo así como una ‘comadreja oscura y peluda’. La compañía que hoy todos conocemos se refundó en 1967, cuando se fusionaron la propia Nokia con una empresa dedicada al plástico y otra al cableado. Con el tiempo, la empresa abandonaría el negocio maderero y con él la comadreja, aventurándose en la industria tecnológica.
Xerox
Xeroz vio la luz en 1906 como Haloid Company, dedicada a la manufactura de papel y equipamiento fotográfico. 20 años después, Chester Carlson, inventor de la electrofotografía, contactó con la empresa para ofrecerles su nueva tecnología. En 1959 nació la primera fotocopiadora, la Haoid Xerox 914. Fue tan popular que la empresa quitó Haloid del logo y del nombre y no se arrepintió. Bueno, al menos hasta la irrupción de la fotografía digital, cuando necesitaron replantear de nuevo sus productos.
Kodak
George Eastman fue uno de los primeros productores en lograr vender en masa máquinas fotográficas, y unos años después cinematográficas, que rápidamente se popularizaron en todos los lugares del mundo. De hecho, muchos le consideran el Steve Jobs de su tiempo al fabricar la primera máquina compacta para uso recreativo, cambiando así el signo de la historia de la fotografía. En el primer logo de la empresa, las iniciales de Eastman Kodak Company se entrelazan dentro de un círculo que luego abandonarían a favor del simple logo con el nombre de la popular campacta.
Firefox
El popular navegador Firefox fue lanzado por Mozilla en 2004, pero antes de ver la luz, sus padres tuvieron que cambiarle de nombre y aspecto un par de veces. Originalmente fue registrado como Phoenix, pero fue denunciado por duplicidad de una marca ya existente. Después excogieron ‘Firebird‘ (pájaro de fuego), que tampoco cuajó. Al final, y no sin tremendas críticas por parte de la comunidad, Firefox pudo surcar la web. Eso sí, aunque su nombre hace referencia al panda rojo, el logotipo que finalmente identifica al navegador es un simpático zorro.
Si funciona, ¿por qué cambiar? Esto es lo que deben pensar los creativos de Google, que pese a haber decorado su logo un sinfín de veces con los famosos ‘doodles’, mantienen la esencia de aquella inquietante pantalla blanca que se abrió al mundo en 1998.
Los (feos) logos originales de grandes empresas tecnológicas
Locuras
#Locuras
No hay comentarios:
Publicar un comentario