Hay algo mágico en el hecho de que durante 165 millones de años nuestro planeta estuviera ocupado por seres tan gigantescos como los dinosaurios.
Sin embargo, la cultura popular los ha envuelto de mitos y de datos que no son del todo precisos:
- “Los dinosaurios no convivieron con los mamíferos”. La realidad es que sí, aunque eran mamíferos de un tamaño mucho más pequeño. Vivieron formando parte de un ecosistema reducido y, generalmente, eran de hábitos nocturnos. La mayoría no superaba los 5 gramos de peso.
- “El T-Rex fue el depredador más grande conocido”. En cuanto a los depredadores terrestres, ese puesto era ocupado por el descomunal Spinosaurus. Asimismo, el título de depredador más grande conocido está muy disputado, pero de momento queda reservado para el Liopleurodon, animal marino ligeramente parecido a un tiburón gigante.
- “¿Plumas o escamas? ¿Sangre fría o caliente?”. Las características de la piel de los dinosaurios es uno de los principales motivos de controversia entre los paleontólogos. En cuanto al tipo de sangre, ésta no era ni fría ni caliente, sino que se mantenía en un extraño terreno intermedio.
- “Los primeros humanos cazaban dinosaurios y mamuts”. Esta es probablemente una secuela del cine de ciencia ficción. Los dinosaurios desaparecieron de la Tierra hace 65 millones de años, después de una estancia de 150 millones, y el hombre propiamente dicho no tiene siquiera un millón de años de antigüedad.
- “Existieron dinosaurios marinos y voladores”. Realmente lo que existieron fueron diversos tipos de reptiles marinos y voladores que convivieron con ellos, pero no eran dinosaurios propiamente dichos. Algunos de esos reptiles marinos eran los plesiosauros, pliosauros, mosasauros e ictiosaurios.
- “Somos la especie dominante gracias a la extinción de los dinosaurios”. La mayoría de dinosaurios tenía una capacidad intelectual similar a la de un avestruz actual. Además, aunque evolucionaron notablemente, ocuparon la tierra durante un periodo de 150 millones de años, mientras que la aparición del homo sapiens sapiens se remonta a hace 600.000 años.
- “Se extinguieron por culpa de un asteroide”. Es poco probable que un meteorito fuese el único causante de la extinción de los grandes saurios, ya que también hay evidencias de diversos cambios en la Tierra previos a su llegada, como el frío y las erupciones volcánicas.
- “Los dinosaurios se extinguieron del todo”. Al contrario, varias especies sobrevivieron a la Gran Extinción y dejaron una descendencia prolífica. Algunos animales actuales, como el colibrí o incluso el gorrión, son considerados descendientes directos de los dinosaurios. El famoso Archaeopteryx es el antepasado de todos ellos.
- “Los brazos del T-Rex no servían para nada”. Pese a la aparente inutilidad que siempre se ha achacado a sus extremidades delanteras, la realidad es que eran algo más largas de lo que se suele representar en las películas o imágenes y eran excepcionalmente poderosas y musculosas.
- “El T-Rex solo veía objetos en movimiento”. A pesar de que su visión quedaba relegada a un segundo plano en comparación con su extraordinario sentido del olfato, sí podía apreciar objetos inmóviles.
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